Del 7 al 11 de setiembre pasados, más de 4.000 participantes de 142 países se reunieron en el XIV Congreso Forestal Mundial que se realizó en Durban, Sudáfrica, bajo el lema “Los bosques y la gente: invertir en un futuro sustentable”. Desde su creación en 1926, esta fue la primera vez que el evento se realizó en continente africano.

Así como en la edición anterior realizada en 2009 en Buenos Aires los efectos del cambio climático sobre los bosques del planeta dominaron la escena, podría afirmarse que en esta oportunidad el dato clave que dejó el CMF es un cambio de visión sobre el rol de los bosques, colocando al sector forestal en el centro del quehacer humano. Una silvicultura centrada en las personas, en los problemas socioeconómicos y en las funciones que desempeñan los bosques, los árboles y las actividades forestales en el desarrollo económico de los países. Aceptando que esas actividades ya no pueden llevarse a cabo de manera aislada, porque son parte integral de las comunidades y de los paisajes, y constituyen un componente vital del desarrollo sostenible en todos los niveles. 

En esta línea, el Congreso planteó que las inversiones realizadas en el sector forestal deben considerarse como inversiones en la gente, en las economías de los países y en el desarrollo sostenible. Y que las potencialidades de las actividades forestales son inmensas tanto para la capacitación y el desarrollo de las personas, para la erradicación de la pobreza, como para el manejo sostenible de los recursos forestales.  

En el programa técnico - académico los temas fueron abordados por más de 800 trabajos en sesiones plenarias y simultáneas, eventos paralelos y presentación de posters.

Como conclusión el CMF produjo tres documentos:  

▪ La declaración de Durban (Perspectiva de los bosques y de la silvicultura para 2050).  

▪ Un mensaje sobre el papel de los bosques para implementar los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS), dirigido a los delegados ante la Asamblea General de las Naciones Unidas y otros organismos y procesos relevantes.

▪ Un mensaje para la 21ª Conferencia de las Partes a la Convención Marco sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas (diciembre 2015 en París), sobre la contribuición de los bosques al nuevo régimen sobre cambio climático. 

La declaración de Durban. 

Uno de los documentos finales elaborados por el CMF bajo el título “La declaración de Durban” intenta trazar una perspectiva de los bosques y de la silvicultura como forma de contribuir a lograr la Agenda de Desarrollo Sustentable para 2030 y un futuro sustentable hasta 2050.

En el mismo se plantea que “los bosques son más que árboles” y son fundamentales para la seguridad alimentaria y el mejor sustento. “Los bosques del futuro aumentarán la resiliencia de las comunidades mediante la provisión de alimentación, energía de la madera, albergue, forraje y fibras; la generación de ingreso y empleo que permitan prosperar a las comunidades y sociedades; el albergue de la biodiversidad, y el apoyo de la agricultura sustentable y del bienestar humano mediante la estabilización de los suelos y del clima y la regulación de los flujos de agua”.  

En otro tramo se afirma que los enfoques integrados del uso de la tierra brindan un modo de avanzar “en la mejora de políticas y prácticas para: abordar las causas de la deforestación; abordar los conflictos sobre el uso de la tierra; capitalizar la gama completa de beneficios económicos, sociales y ambientales de integrar los bosques con la agricultura, y mantener múltiples servicios forestales en el contexto del paisaje”.  

En la declaración se reconoce a los bosques como una solución esencial para la adaptación y la mitigación del cambio climático. Y en este punto se aclara que “los bosques manejados sustentablemente aumentarán la resiliencia de los ecosistemas y de las sociedades y optimizarán el papel de los bosques y de los árboles en absorber y almacenar el carbono en tanto también brindan otros servicios ambientales”. 

El documento especifica que para que esta perspectiva se cumpla requerirá nuevas asociaciones entre los sectores forestal, agrícola, financiero, energético, del agua y otros, y compromiso con los pueblos originarios y las comunidades locales. Resaltando además, que demandará “mayor inversión en educación forestal; comunicación; construcción de capacidad; investigación, incluyendo el impacto del cambio climático en la sanidad y las enfermedades forestales, y la creación de empleos, en especial para los jóvenes”. Subrrayando en particular que, “la igualdad de género es fundamental, con la participación plena de las mujeres”. 

"La declaración refleja la enorme diversidad y riqueza de puntos de vista y experiencias de todos los participantes en el Congreso, que recomendaron formas de convertir la visión en realidad", aseguró Tiina Vähänen, Directora Adjunta de la División de Evaluación, Ordenación y Conservación Forestales de la FAO.  

Mensaje a la Asamblea General de las Naciones Unidas. 

Un segundo documento emitido por el Congreso a su finalización, consiste en una recomendación que dirige a la Cumbre de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre el papel de los bosques en lograr los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS). 

El texto describe que los bosques cubren un tercio de la superficie emergida de la tierra y su conservación y manejo sustentable son esenciales para el logro de los ODS. Pueden proveer una amplia gama de productos y servicios que contribuyen al desarrollo social y económico en tanto mejoran el ambiente. 

“Los bosques son importantes en particular para los centenares de millones de personas en las áreas rurales, incluyendo a mucha de la gente más pobre del mundo, que depende de ellos para alimentación, energía de la madera, albergue, fibras y sustento. También ayudan a mitigar el cambio climático, proteger los suelos y el agua y albergar a más del 75% de la biodiversidad del mundo”. 

En otro punto se aclara que la necesidad de manejar sustentablemente los bosques está establecida claramente en ODS 15 y en la meta de ODS 6 sobre protección y restauración de los ecosistemas relacionados con el agua. “Además, debido a su multifuncionalidad, los bosques tienen un papel a jugar en el logro de varios de los otros ODS, incluyendo en especial los relacionados con terminar con la pobreza, lograr la seguridad alimentaria, promover la agricultura sustentable, asegurar el acceso a la energía sustentable para todos y combatir el cambio climático”. 

Refiriéndose a los muchos desafíos que enfrenta la humanidad, dice que hay que encararlos de manera integral, y esto requiere coordinación y colaboración intersectorial. “Para implementar con éxito los ODS, los bosques y la silvicultura deben integrarse en estrategias para el desarrollo sustentable a nivel tanto internacional como nacional. La implementación requerirá capacitación, políticas transversales y mejor gestión entre los sectores, incluyendo la igualdad de género y los acuerdos de tenencia adecuados así como el clima de inversión favorable”. 

El documento concluye que “los dirigentes y los practicantes forestales en todo el mundo están preparados para redoblar sus esfuerzos para manejar sustentablemente los bosques de manera de que puedan brindar la gama completa de bienes y servicios que contribuyan al desarrollo sustentable”. 

Finalmente enuncia que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y otras organizaciones internacionales relevantes “están listas para apoyar el fortalecimiento de los aportes de los bosques a los ODS al hacer disponibles datos e información, brindar apoyo técnico y promover las buenas prácticas y el diálogo”.

Mensaje sobre el cambio climático.

El Congreso lanzó igualmente un mensaje a la Conferencia de las Partes (COP) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que debe reunirse en París en diciembre de este año para debatir un nuevo acuerdo sobre el cambio climático global.

En el mismo se describe que los enfoques integrados del uso de la tierra brindan un modo de avanzar en la mejora de políticas y prácticas para: abordar las causas de la deforestación; los conflictos sobre el uso de la tierra; capitalizar la gama completa de beneficios económicos, sociales y ambientales de integrar los bosques con la agricultura, y mantener múltiples servicios forestales en el contexto del paisaje. 

Asimismo se afirma que los bosques son una solución esencial para la adaptación y la mitigación del cambio climático. “Los bosques manejados sustentablemente aumentarán la resiliencia de los ecosistemas y de las sociedades y optimizarán el papel de los bosques y de los árboles en absorber y almacenar el carbono en tanto también brindan otros servicios ambientales”. 

Según se vio en el Congreso el cambio climático “plantea una seria amenaza al planeta y a los bosques y a la gente dependiente de ellos, y hay riesgo de que las acciones no cumplan con lo que se requiere, y también puede llevar a mayores amenazas a la sanidad vegetal y a la resiliencia del ecosistema”. 

Las políticas y las respuestas al cambio climático - continúa - presentan oportunidades para los bosques, como nuevas y adicionales fuentes de financiamiento y mayor apoyo político para la gestión forestal y el compromiso de los interesados. 

En esta línea se afirma que “la Reducción de las Emisiones de la Deforestación y de la Degradación Forestal (REDD+) es un importante mecanismo mediante el cual los bosques pueden contribuir a la mitigación del cambio climático, aunque hay que considerar con cuidado la efectividad, la coordinación y la movilización de los recursos financieros en este enfoque”. 

Al reconocer la urgencia de abordar las amenazas del cambio climático, los participantes del XIV Congreso Forestal Mundial recomiendan las siguientes acciones: 

• Aumentar la comprensión del cambio climático entre los gobiernos y otros interesados, con particular atención a las comunidades dependientes de los bosques y a los pueblos originarios.  

• Promover las asociaciones y los intercambios sur-sur para beneficiarse de la experiencia y del conocimiento existentes y crecientes sobre acciones de adaptación y mitigación en el terreno, asegurando que las comunidades dependientes de los bosques y los pueblos originarios estén plenamente comprendidos. 

• Aumentar la comprensión de los desafíos y de las oportunidades para los gobiernos y otros interesados en abordar el cambio climático, y animarlos a abordar estos en el más amplio contexto del desarrollo sustentable y del logro de los Objetivos de Desarrollo Sustentable. 

• Continuar aumentando la disponibilidad y la calidad de la información para asistir a los formuladores de políticas en la toma de decisiones y ayudar a los practicantes a cumplir múltiples objetivos de la adaptación y de la mitigación del cambio climático. 

• Animar la evaluación y la comunicación del avance en la mitigación y la adaptación del cambio climático, incluyendo mediante la movilización más coordinada y efectiva de diversos recursos financieros.

Por Roberto Luis Minoli.