A dos meses de estar operativa la línea de crédito del BICE (Banco de Inversión y Comercio Exterior) con una tasa de interés del 13% anual para las pymes de la foresto – industria y la industria maderera, destinada a la compra de bienes de capital, ya se aprobaron préstamos por $40 millones y hay, en proceso de análisis, por otros $40 millones.

El monto total de la línea asciende a $200 millones y hasta el momento entre las máquinas que se fueron financiando se encuentran secaderos; calderas; machimbradoras; para fabricación de pallets; para la fabricación de tableros de listones; para la fabricación de vigas laminadas; aunque pueden incluirse la mayoría de las máquinas y equipos comprendidos en cualquiera de los procesos de la cadena de valor sectorial.

La medida persigue un doble objetivo: por un lado, busca promover la competitividad y la modernización de las empresas del sector a través de la adquisición de bienes de capital y por otro, mejorar la inclusión financiera de estas empresas que tienen dificultades para acceder al crédito formal.

El anuncio de la línea se había formalizado el 5 de abril pasado, en la reunión de la Mesa Foresto-Industrial realizada en Puerto Esperanza (Misiones), que fue presidida por el presidente Mauricio Macri, quien estuvo acompañado por los ministros de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere; de Producción, Francisco Cabrera; y de Energía y Minería, Juan José Aranguren. Además, participaron los gobernadores de Misiones, Hugo Passalacqua; de Entre Ríos, Gustavo Bordet; de Corrientes, Gustavo Valdés; de Formosa, Gildo Insfrán; y de Chaco, Domingo Peppo; entre otros funcionarios provinciales y nacionales. El sector privado estuvo representado por asociaciones, cámaras, como AFoA, FAIMA, AFCP, SRA, ASORA, INTI, RITIM, entre otras.

Los créditos son de entre $500.000 a $3.000.000 por empresa, con un plazo de hasta 5 años y podrán cubrir el 80% de la inversión neta de IVA.

Esta notable mejora en las condiciones de financiamiento por parte del BICE, surge de un acuerdo para la bonificación de la tasa de interés entre el ministerio de Producción y ASORA – Asociación de Fabricantes y Representantes de Máquinas, Equipos y Herramientas para la Industria Maderera. La línea contará además, con los avales que aportará Garantizar SGR para mejorar la inclusión financiera.

En su rol de banco de desarrollo, el BICE otorgó préstamos en 2017 por más de $15.000 millones, más que duplicando lo realizado el año anterior y, para 2018, proyecta destinar créditos a las empresas argentinas por más de $30.000 millones.


La demanda supera las expectativas del BICE

Esta línea de crédito tiene un doble objetivo. Por un lado, hacer más eficiente la cadena productiva. Por otro, brindar herramientas de financiación a las empresas productoras de maquinaria. “Se buscó un instrumento que potenciara a todas las partes, logrando una tasa muy accesible y enfocado a lo que creemos que es el nudo o parte del nudo donde se atrasa la producción, que es en el proceso de industrialización. Por eso, apuntamos a máquinas de fabricación local, o bien a alguna maquinaria importada, siempre y cuando no desplace industria argentina”, señaló Juan Cruz Malbrán, subgerente Vendors Organismos del BICE.

Este tipo de líneas de crédito se utiliza en algunos otros sectores, como por ejemplo, maquinaria agropecuaria, rodados. El objetivo del BICE es apoyar a todas las empresas, con especial foco en el segmento PyME, como es el caso de la línea foresto-industrial.

“Para lograr este nivel de tasa hay un esfuerzo muy importante del ministerio de Producción que aporta un subsidio de 6 puntos, y también de los fabricantes de maquinaria que subsidian otros 4 puntos. Estamos brindando un instrumento de financiamiento muy accesible a valores totalmente alejados de los que se consiguen en el mercado”, dijo Malbrán, y aclaró que “un sector que habitualmente encuentra complejidades para acercarse a los bancos, ve que se abren las puertas. El BICE, complementando la misión comercial de los otros bancos, cumple el rol de banco de desarrollo para que esas empresas puedan ir creciendo junto con el proyecto país”.

Según el directivo las operaciones concretadas rondan los $40 millones y hay otras con distinto grado de avance.

“Es importante destacar que los empresarios pueden acceder a un crédito a 5 años de plazo, con 6 meses de gracia, y con distintas garantías, como por ejemplo fianza de socios. Esto se logra con el compromiso de los fabricantes, quienes no sólo subsidian la tasa de interés, sino que a su vez, asumen con el banco la obligación de hacer la recompra de la maquinaria si el usuario final que toma el crédito no cumpliera con sus obligaciones”.

La línea tiene vigencia de un año pero en el BICE tienen la esperanza de agotar los fondos con anticipación. “De hecho, es importante que en tan poco tiempo ya se otorgaron créditos por el 20% del total, lo que demuestra que la industria tiene necesidad de reequiparse con tecnología de punta para mejorar su competitividad”, acotó Malbrán. Y aunque no lo dijo expresamente, dejó flotando la probabilidad que si al vencer el plazo estipulado para la línea, se comprobara que hay una mayor demanda de máquinas por parte del sector, existiría la posibilidad de conseguir una extensión en el plazo o en el monto de los fondos.

Asimismo, el directivo remarcó la importancia del alcance federal que están alcanzando los créditos, ya que si bien la demanda está concentrada en las provincias históricamente forestales, como Misiones, Corrientes, y Entre Ríos, han tenido demanda de empresas de San Juan, Santa Cruz, Provincia de Buenos Aires, Salta y Tucumán.

“El objetivo de esta línea fue no concentrarse en maquinaria forestal sino en máquinas para los posteriores procesos de industrialización de la madera. Y esto explica el grado de federalización que se está alcanzando, ya que hay pymes que fabrican muebles y otros productos en todo el país. En este punto estaba interesado especialmente el Presidente Macri cuando se fijó en las posibilidades de desarrollo de la foresto-industria, la diversidad de una cadena productiva extendida en todo el país”, concluyó Juan Cruz Malbrán.


Es una línea ideal para la industria de la madera

“Para el momento que estamos viviendo y con el nivel de inflación que tenemos es una línea de crédito de excepción, ideal para el sector porque da una ventaja importante con una tasa de interés que no existe en el mercado”, afirmó Pedro Reyna, presidente de la Federación Argentina Industria Maderera y Afines – FAIMA.

Profundizando el concepto, el directivo señaló que en un contexto de crecimiento del país, esta línea se hubiera transformado “en una explosión de inversión en el sector”. Agregando que “es un mérito de ASORA haber hecho las gestiones correspondientes con el ministerio de Producción y el BICE para habilitar la línea, además del aporte que hacen los fabricantes de máquinas para subsidiar la tasa de interés”.

Asimismo, Reyna manifestó que “las empresas que tengan la mínima condición para reequiparse no pueden dejar de aprovechar este crédito”.

Consultado acerca de un pedido que se formuló al director Nacional de Desarrollo Foresto Industrial, Nicolás Laharrague, en el reciente Congreso Maderero organizado por FAIMA, en San Francisco (Córdoba), sobre la posibilidad de elevar el monto máximo de los créditos a las empresas hasta $20 millones para renovar líneas de aserrado, específicamente en la región del NEA, Reyna dijo que era lógico porque en la actual coyuntura “los aserraderos son uno de los pocos segmentos de la cadena con posibilidades, incluso con este nivel de dólar pueden tener demanda de exportación”.

Para el presidente de la Federación, el financiamiento es uno de los problemas más serios que tiene la Argentina hoy. “Esta línea del BICE que colabora en nuestro segmento exclusivamente para la compra de bienes de capital es una perla inapreciable”.

Hoy hay dificultad para utilizar los mecanismos que el Estado está tratando de desarrollar para las pymes – continuó Reyna – y enfatizó que hay dos cuestiones que se deben mirar.

Una es el desarrollo del mercado interno. “Estamos haciendo gestiones para conseguir el Ahora 12 y el Ahora 18 que no toman la tasa del banco, y es un mecanismo de asistencia para generar demanda en el mercado interno. La otra, estamos pidiendo flexibilizar el tratamiento de la situación impositiva de las empresas, porque están en un ciclo donde van a tener cada vez más dificultades, no sólo respecto al pago de salarios sino también, para pagar los impuestos”.

Finalizando, Pedro Reyna remarcó que “el esfuerzo que realiza el área de gobierno de Producción para conseguir instrumentos que beneficien a las pymes, se desvirtúa en otras áreas provocando una recesión con una tasa de interés impagable”.


Para competir se necesita una renovación de tecnología importante

“La línea del BICE me pareció espectacular y me resultó interesante el hecho de la rapidez con la que están actuando en el banco. Los fondos están disponibles y los créditos están atomizados a empresas de todo el país. Eso es importante para que no caigan en 10 ó 20 compradores sino que sean la mayor cantidad posible. El otorgamiento es ágil, en la medida que las empresas presenten la documentación como corresponde”, manifestó Edgardo Picotto, titular de Metalúrgica Picotto.

Consultado sobre cuáles son las principales máquinas que está requiriendo el mercado, Picotto dijo que en su caso cepilladoras de cuatro caras de baja, media y alta producción; alimentadores; cargadores; y en general todos los productos de su propia fabricación; “que son los que tratamos de empujar por tratarse de productos de origen nacional, y obviamente, nos da un impulso importante en nuestro trabajo”.

Picotto también hizo mención que “fabricar en pesos” le da una ventaja competitiva, ya que el comprador que va a buscar una máquina importada tiene que estar pendiente de la variación del tipo de cambio desde que pide la cotización hasta el momento que sale la operación. “Y por más rápido que sea, se están dando diferencias importantes”.

Por otra parte, el empresario aseguró que ya pudo concretar ventas a través de esta línea de crédito del BICE y que tiene otras en estado avanzado. “Siempre tratamos de buscar buenos clientes, que sabemos están ordenados, porque es importante acercarle al banco un cliente cumplidor, que no le va a hacer perder tiempo y va a llevar su documentación de manera correcta”.

En referencia al estado actual de la tecnología instalada en la industria, Picotto enfatizó que la vida útil de las máquinas en la industria de la madera está totalmente obsoleta y en el 90% de los casos requiere una renovación inmediata. “Conste que estamos hablando de renovación y no de proyectos nuevos de inversión que incorporen tecnología”, acentuó Edgardo Picotto.


Las exigencias del banco son mínimas y la respuesta muy rápida

“Para nosotros la experiencia es extraordinaria. En el BICE están trabajando con una eficiencia y una celeridad que es sorprendente para una entidad oficial. Cada caso que presentamos, en el mismo día o al día siguiente contactan a la empresa, le piden la documentación y se comprometen en 10 días a dar una respuesta si califica o no para el crédito”, afirmó entusiasmado Jorge Göttert, presidente de Göttert SA.

Según el empresario, la documentación que exige el banco no es compleja y hay muchos créditos que están saliendo por firma directa con aval de los socios, otros con la SGR de Garantizar.

Göttert señaló que ya tiene seis clientes con créditos aprobados y otros seis en proceso de gestión, porque a los clientes todavía les falta completar alguna documentación, asegurando que “ningún caso se debe a demoras del banco”.

El empresario consideró que para el sector maderero “es extraordinario” porque la tasa de interés para la compra de bienes de capital “que se le aproxima más en el mercado está por lo menos 10 puntos arriba de esta (13%)”.

Göttert aclaró que el mercado recibió muy bien esta línea de crédito. “Las empresas del sector que están trabajando bien y con buenas perspectivas, que no aprovechen esta herramienta, es porque realmente no tienen intenciones de invertir. Mucha gente que tenía las inversiones postergadas porque no encontraba líneas de financiamiento interesantes, hoy se están volcando a esta línea, y desde ASORA junto al ministerio de Producción y el BICE, estamos colaborando para que puedan hacerlo”.

Es para destacar – dijo – la celeridad con que el gobierno resolvió la instrumentación de esta línea. “Desde ASORA empezamos a hablar con el BICE el 14 de marzo y el 6 de abril el presidente Mauricio Macri lo estaba anunciando en la reunión de la Mesa de Foresto Industria, que se hizo en Puerto Esperanza, en Misiones”.

Göttert dejó abierta la posibilidad que dada la buena relación que existe con el BICE, no habría que descartar que en el caso de algún proyecto especial que involucre la instalación de mucha maquinaria de origen nacional, podría conseguirse la autorización del Directorio del banco para aumentar el monto del crédito.

El empresario consideró muy importante que todas las entidades empresarias involucradas en la cadena de valor sectorial, realicen una amplia difusión entre sus empresas asociadas de esta línea que da una inmejorable oportunidad para que puedan equiparse y mejorar su competitividad, tanto en costo como en calidad de producción.

“Las autoridades del BICE tienen expectativas de agotar los fondos de esta línea para fin de año, pero estimo que a pesar de las dificultades económicas del país, el cupo de créditos se completará antes, porque indudablemente, hablar hoy de una tasa del 13% anual a cinco años de plazo resulta algo increíble”, concluyó Jorge Göttert.

Por Roberto Luis Minoli