La sostenibilidad comienza a influir en el comercio electrónico
Si 2020 fue el año récord para el comercio electrónico, 2021 fue el año de la consolidación del sector, con unas cifras que han mantenido la tendencia alcista durante los primeros meses del año, pero sin crecimientos tan elevados. Todo hace prever que durante 2022 continuará la línea ascendente del eCommerce, apuntalando la consolidación de manera definitiva.
Así lo señala un pormenorizado informe de Ecommerce News, en el que se afirma que el modelo de consumo digital ha llegado para quedarse y 2022 se dibuja como el año de transición hacia un ecosistema 100% phygital, en el que el comercio tradicional y electrónico coexistan sin competir directamente entre ellos.
“El desarrollo tecnológico acelerado por la pandemia nos ha inmerso de lleno en la era del comercio electrónico. Lo que comenzamos a ver ahora son los primeros pasos de los que serán los modelos de consumo del futuro, por lo que es un periodo particularmente interesante en este sentido”, comentó la directora de Marketing de Packlink Noelia Lázaro, una agencia que realizó a fin del año último una encuesta de gran alcance sobre los modelos globales del comercio electrónico.
Ese relevamiento mostró como tendencias para el año 2022 la sostenibilidad y la flexibilidad en las entregas y métodos de pago, pero también el surgimiento de nuevos canales de venta. En el horizonte se divisan los primeros pasos de la realidad virtual.
Sostenibilidad
El sector del comercio electrónico lleva años incrementando sus esfuerzos en materia de sostenibilidad y cuidado del medio ambiente, por ejemplo, reduciendo de forma considerable el uso de plásticos para el embalaje o la introducción de packaging reciclable o reutilizable, enfocado hacia un modelo de economía circular.
Pero en 2022 el principal frente de acción estará más vinculado al reparto, con las flotas de las empresas de paquetería y delivery acelerando su transición hacia los vehículos eléctricos de todo tipo. Según el informe de Packlink, los europeos tienen en cuenta el compromiso medioambiental y social de una marca en su elección de compra online y estarían dispuesto a pagar un precio extra por un embalaje de paquetes y envíos que fuera respetuoso con el medioambiente.
Nuevos métodos de pago
Mayor flexibilidad y mayores facilidades en los pagos son demandas crecientes. El sector fintech es uno de los más destacados en este momento, donde comienzan a surgir también aplicaciones y soluciones financieras que permitirán fraccionar pagos sin comisiones.
QuickCommerce
Poder recibir compras online en pocos minutos en nuestra casa se ha convertido en una realidad y su número de usuarios no para de crecer. Y aunque aún existen dudas sobre este modelo de comercio, principalmente vinculadas a la ultra rapidez, todo parece indicar que este año será el de su expansión y que poco a poco pasará a ser más común en ciudades medias y grandes.
Click & Collect
Los puntos de conveniencia o drop-sites es una práctica que sigue extendiéndose. Sus innegables ventajas medioambientales y en términos de privacidad (no será necesario compartir la propia dirección nunca más), así como la flexibilidad en la recogida, indica que pronto comenzarán a florecer los drop-sites.
Redes sociales
La web 2.0 parece que pronto será el cuartel general del eCommerce, pero las posibilidades de que el cliente llegue hasta un producto crecerán sobremanera. El primer paso son las redes sociales, especialmente Facebook e Instagram, que se han convertido en nuevos mercados que hacen más intuitiva la experiencia del consumidor a través de videos, reseñas de productos y la posibilidad de comprar sin intermediarios.
Lo que viene es el Live Commerce: no más fotos del producto, sino vídeos y visitas virtuales que permiten conocer todas las especificaciones y usos a través de livestreams y tutoriales en los que se puede preguntar y que contienen enlaces directos a la página web de la tienda.
Evolución
“El eCommerce es un sector en constante evolución y muy exigente en este sentido. Los profesionales del sector debemos actualizar nuestros conocimientos y herramientas de forma constante. Pero la clave es que esto nos permite conocer cada vez mejor a nuestros clientes y usuarios. Y la orden es clara, debemos agilizar, simplificar y hacer más sostenible la forma en que nos aproximamos a ellos”, concluye Lázaro.