En Casa FOA la madera volvió a mostrar su versatilidad
Muebles, revestimientos, pisos: cuando parece que todas sus posibilidades fueron exploradas, la madera vuelve a sorprender en sus formas de aplicación en proyectos de interiorismo.
La última edición de Casa FOA Retiro 2022 ‒que se desarrolló hasta el 20 de noviembre en un antiguo convento de religiosas de ese barrio porteño‒ mostró a la madera en una faceta ya conocida: la de su versatilidad, ofreciendo soluciones para ideas a las que no se accede con otros materiales en muebles, pisos y revestimientos. A su vez, se la convoca en gran parte de los proyectos para darle a los mismos la tan buscada cercanía con la naturaleza y el ansiado clima de calidez para el habitar de nuestro tiempo.
La clave para entender por qué la madera vuelve a ser protagonista en una muestra que propone pensar los "Escenarios futuros" del diseño de interiores está en la asociación con el bienestar.
Se trata de una sociedad, un ensamble que tiene muchas variantes y que llegó para quedarse un largo tiempo entre nosotros de la mano de la necesidad de "estar" en un lugar sentido y vivido como propio.
El "estar" es el eje que domina los diseños de los casi treinta espacios que propone la muestra. En suma, se trata de una búsqueda de respuestas a la necesidad vital del descanso, la calma, el reposo, el ocio creativo, la desconexión con el "afuera", la experiencia única.
La forma en que se busca ese bienestar no tiene ni un camino ni una fórmula única, pero sí líneas conceptuales que encuentran en la madera una gran intérprete a la hora de concretar las demandas para los interiores de este tiempo, sean de una casa, una oficina o un bar; de un estilo sobrio o provocador híper tecnológico o natural.
El bienestar se asocia con los sentidos, la percepción. Es una envolvente donde las aristas se suavizan con el dominio de las líneas curvas; aparecen los aromas y texturas para potenciar la sensorialidad; la paleta de colores juega a la neutralidad con apenas toques disonantes de tonos ligados a la naturaleza o la elegancia.
La búsqueda de ese bienestar envolvente encuentra en la madera a una intérprete amable, que permite jugar de forma armónica con otros materiales (cobre, tejidos, piedras); que colabora con la iluminación ‒cada vez más importante‒ para crear atmósferas únicas.
Definitivamente, en los "escenarios futuros" del habitar, la madera tiene su lugar.
Por Alberto Pelagallo
Fotos: Prensa Casa FOA y ASORA Revista
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